http://www.metmuseum.org/works_of_art/collection_database/european_paintings/vase_of_roses_vincent_van_gogh/objectview_zoom.aspx?page=109&sort=0&sortdir=asc&keyword=&fp=109&dd1=11&dd2=0&vw=1&collID=11&oID=110000976&vT=1
Nacen del verde vaso blanquecinas manchas retorcidas, exageradas se amontonan sobre el alto relieve que choca con mi pupila. Tallos y rojizos botones mezclados a rosas que duermen sueños lilas, viven, se levantan del lienzo esparciéndose en la atmósfera. La luz da vida a personajes entre ellas escondidos: duendes, rostros, brazos extendidos, ojos sin caras se agazapan entre los contornos negros que emergen de tu verde vaso. Labios entreabiertos, cabellos, manos, tus manos de pintor excelso. Choque eléctrico, mi ojo, tus rosas, el verde alimonado del contraste, vaso deformado. Tu ojo pincel me contempla desde el lienzo. Te descubro y te encuentro, te reconozco dentro. Me miras con rosas, arden las mejillas; mil ojos riegan tus rosas, a través de la lágrima el cuadro se deforma, distorsiona la figura, la mano se hace pie, la piel se convierte en rosa. Los tonos verdosos, el color crema de las rosas. Los ojos de las hojas saben que lloro, choca mi boca en el cristal verde de tu vaso, bebo en él la vida rosa. Me extasío, devuelvo unos pasos, regreso y estoy prendida a ti, a las rosas. Vivo el instante de hace un siglo, otro siglo más será el puente de tus bellas rosas.
Nacen del verde vaso blanquecinas manchas retorcidas, exageradas se amontonan sobre el alto relieve que choca con mi pupila. Tallos y rojizos botones mezclados a rosas que duermen sueños lilas, viven, se levantan del lienzo esparciéndose en la atmósfera. La luz da vida a personajes entre ellas escondidos: duendes, rostros, brazos extendidos, ojos sin caras se agazapan entre los contornos negros que emergen de tu verde vaso. Labios entreabiertos, cabellos, manos, tus manos de pintor excelso. Choque eléctrico, mi ojo, tus rosas, el verde alimonado del contraste, vaso deformado. Tu ojo pincel me contempla desde el lienzo. Te descubro y te encuentro, te reconozco dentro. Me miras con rosas, arden las mejillas; mil ojos riegan tus rosas, a través de la lágrima el cuadro se deforma, distorsiona la figura, la mano se hace pie, la piel se convierte en rosa. Los tonos verdosos, el color crema de las rosas. Los ojos de las hojas saben que lloro, choca mi boca en el cristal verde de tu vaso, bebo en él la vida rosa. Me extasío, devuelvo unos pasos, regreso y estoy prendida a ti, a las rosas. Vivo el instante de hace un siglo, otro siglo más será el puente de tus bellas rosas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario